En COEDPI celebramos que Eskrima de Combate Valladolid renueva su colaboración para la temporada 25/26. Este proyecto aporta autenticidad, técnica armada y enfoque realista, enriqueciendo nuestra red con su visión clara y directa.

Desde Valladolid, el proyecto se ha definido por un compromiso firme con el combate armado realista. Su enfoque no es meramente técnico, sino profundamente práctico: entrenar en escenarios verídicos, entender el ritmo del encuentro y priorizar la ética del combate. Su lema resume su filosofía: “sin combate, no hay eskrima.” Esa máxima resuena con fuerza en la comunidad.

La estructura formativa está presidida por instructores con amplia trayectoria, que mantienen vivo el espíritu del mestizaje marcial formado desde estilos como el karate, full contact, kickboxing, sanda y, por supuesto, la eskrima. Esa diversidad de fondo y forma aporta solidez y madurez a la enseñanza.

Ofrecen un abanico de propuestas: grupos regulares, clases privadas, seminarios, cursos puntuales y campamentos. Todo orientado a una práctica comprometida, donde aprender a manejar armas como bastones, cuchillos o machetes se entiende como herramienta de autoconfianza, disciplina y responsabilidad.

Con esta renovación, COEDPI suma una voz que integra protección, realismo y solidaridad. Eskrima de Combate Valladolid refuerza nuestra apuesta por proyectos que combinan formación marcial con valores firmes y pragmatismo defensivo.