El striking moderno surge como evolución técnica dentro del mundo del combate a partir de los años 2000, cuando entrenadores de boxeo, kickboxing, muay thai, MMA y sistemas híbridos comienzan a integrar sus mejores herramientas en un enfoque unificado.
A diferencia de los estilos tradicionales o deportivos rígidos, el striking moderno se basa en:

• biomecánica del golpeo
• trabajo mixto de manos, piernas, codos y rodillas
• cambios de guardia
• desplazamientos multidireccionales
• control de distancia dinámico
• adaptación al oponente y al entorno
• integración de golpeo con clinch y defensa

Hoy es una metodología usada por luchadores profesionales, practicantes de artes marciales mixtas, escuelas de defensa personal urbana y gimnasios que buscan un enfoque actualizado, técnico y funcional.