El origen del proyecto: INCUAL y Europa
La iniciativa responde a una voluntad europea de profesionalizar sectores mediante estándares comunes. Profesiones como cocina, mecánica o transporte sanitario han vivido este proceso, y ahora es el turno de la defensa personal. La idea es establecer contenidos formativos homogéneos que garanticen un nivel mínimo antes del ejercicio profesional.
Este tipo de titulación, al provenir del Estado, tiene validez en toda la Unión Europea y facilita la movilidad laboral. Además, resuelve problemas de habilitación ante organismos como el CNP o la Guardia Civil, que muchas veces no reconocían titulaciones privadas.
Necesidad de una titulación oficial estatal
Uno de los principales objetivos de esta cualificación es evitar conflictos legales derivados de la falta de regulación. La nueva titulación oficial, al estar publicada en el BOE, tiene plena validez administrativa y no genera dudas a los tramitadores de expedientes.
Incompatibilidades con federaciones deportivas
Desde el INCUAL se estableció claramente que la defensa personal no debe estar bajo el ámbito del deporte, sino del de seguridad. A diferencia de los deportes de combate (como el karate o el judo), cuyo objetivo es la comparación competitiva, la defensa personal busca salir ileso de una agresión.
Este criterio legal y funcional distingue entre actividad deportiva (como fin) y actividad física al servicio de un fin (seguridad personal), como ocurre en profesiones como la construcción.
Nivel III y reconocimiento jurídico
Tras pasar por todos los controles internos y externos, la cualificación fue aprobada en Consejo de Ministros el 27 de junio de 2023 como una de las 30 nuevas cualificaciones. Se trata de una cualificación de Nivel III, con posibilidad futura de derivar en un certificado de profesionalidad y, más adelante, en una FP.
Ver enlace oficial: https://www.educacionyfp.gob.es/prensa/actualidad/2023/06/20230627-cualificacionesfp.html
Qué esperar del futuro: certificado, FP y profesionales en activo
Como ocurrió con profesiones como vigilante de seguridad o cocina, se espera que esta cualificación de lugar primero a un certificado de profesionalidad SEPE y, posteriormente, a un ciclo de FP. Los profesionales en activo podrán justificar su experiencia con contratos, facturas, altas de autónomos o convenios, sin que se vean excluidos.
El caso de la defensa personal es amplio y diverso. Incluye desde instructores de krav maga hasta formadores en academias de seguridad, ONGs, colegios, empresas de transporte, colectivos de mujeres o centros sanitarios. Este proceso permitirá diferenciar entre quienes ejercen profesionalmente y quienes lo hacen de forma amateur o complementaria.
Conclusión
Desde COEDPI consideramos este paso como una gran noticia para la profesionalización del sector. Se reconoce la diversidad y la seriedad de quienes ejercen la docencia en defensa personal, y se establece un camino claro, legal y oficial para su reconocimiento.
El futuro ya está en marcha. Sigue esta serie para conocer todos los detalles sobre cómo obtener tu habilitación oficial como Instructor en Defensa Personal.